3 abril: una tarde lluviosa

Está lloviendo de nuevo mientras escribo a última hora de la tarde. Después de no salir ayer por razones totalmente ajenas y fuera de mi control, y hoy porque las rodillas siguen gruñiendo y la única respuesta según la veterinaria de reumatología es descansarlas y seguir con los analgesicos, decidí poner este blog al día. Pero como casi siempre, hay algo que te hace la vida más interesante y que a la vez te retrasa.

Sobre las 14.15, justo cuando ibamos a almorzar (3 de los socios de eta casa están MUY lentos los domingos), iba una llamada de Bob Hibbett. 'Andy, ¿sabes si los tiburones peregrinos se ven en el Mediterráneo?'

A cual pregunta mi respueta era que no tenia ni puñetera idea, y a la vez me dijo que estaba mirando a uno frente al Guadalhorce. Y como vive en Cornualles, donde están comunes, sabe como son. Y por medio de esta conversación, la vida se complicó porque había dos currucas/mosquiteros en los bajos de los arbustos en el jardín. ¿Qué hacer? Mirar a las aves y luego llamar a amigos, biológos marinos, que deben saber la situación del tiburón peregrino en el Med.

Uno de las aves era una Curruca Carrasqueña, un machito precioso, que vi de nuevo tras el almuerzo, y la otro un buen ejemplo de ¡Díos sabe que! porque llegó un Cernicalo Vulgar que se sentó en el pino. Pero como después de almorzar había 2 Mosquiteros Musicales, parece razonable pensar que la no idenitifcada era uno de ellos. Pero pierdo el hilo.

Creyendo que Salva estaba embarcado llamé a Xulio en Galicia y con gran dificultad pudimos comunicar, pero me dijo que Salva habia vuelto a Málaga, así le llame y también a Antonio Tamayo. El resultado final era que todos vimos el bicho, gracias a Bob. Aunque era distante era grande y nos era posible ver claramente su aleta dorsal vertical y cola grande, y de vez en cuando su 'nariz' cuando la sacó un poco del agua. Un tiburón nuevo para mi, y para Antonio, pero para Bob y Salva algo más corriente. Pero sin embargo algo diferente.